viernes, 28 de noviembre de 2008

LAS CADENAS DEL TIEMPO

Cada día que pasa, el tiempo acelera su marcha, los días giran en el carrusel de la semana a una velocidad de vértigo,. El lunes se transforma en viernes sin apenas hacerse notar y el fin de semana se me escapa de entre las manos como un puñado de arena. Sin embargo hay horas que se eternizan, minutos que detienen el péndulo y me miran con ojos desafiantes.
El tiempo es un concepto puramente humano, por eso no hay nada tan subjetivo, descontando el amor. Alguien debería adaptar la teoría de La relatividad a nuestro cerebro, explicarnos porque en el tren de la vida, no se ven las cosas igual cuando estás dentro que cuando estás fuera, cuando viajas en primera o lo haces en el furgón de cola.
Los Psicólogos nos dicen que su percepción está en función de la memoria acumulada, por eso conforme envejecemos, el tiempo transcurre con más celeridad, que en los momentos de peligro, la memoria graba con todo detalle, para aprender cómo hemos sobrevivido a ese riesgo, y que por eso, el reloj parece detenerse.
En los extremos de nuestro ciclo vital, cronos nos abandona. ¿Quién recuerda cuanto duró su nacimiento?. Espero tener la suficiente lucidez como para poder ver detenerse el péndulo de mi vida, y romper las cadenas que me esclavizan al calendario con mis propias manos. Solo entonces podré decir que soy realmente libre.

JUANMAROMO

1 comentario:

Anónimo dijo...

Vamos a ver, Joséluis, esperas a estar muerto para ser libre ! nadie es absolutamente libre NUNCA, pero si para ser totalmente libre hay que morirse, no juego. PIENSA QUE DESPUES NO HAY NADA MAS. Aprovecha tu oportunidad ahora, cuanto antes, nunca serás tán joven como en este minuto. En cuanto a lo que comentas que los psicólogos dicen, pues no sé yo, aquella clase debía pasarla en la cafetería porque no es así como yo tengo entendido que funciona la cosa.