Mostrando entradas con la etiqueta CRISIS SINDICATOS "eSTADO DEL BIENESTAR" CONSUMO. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta CRISIS SINDICATOS "eSTADO DEL BIENESTAR" CONSUMO. Mostrar todas las entradas

lunes, 2 de agosto de 2010

ACOSO Y DERRIBO DE "EL ESTADO DE BIENESTAR"

De un tiempo a esta parte todo son lamentos por los recortes en subsidios y pensiones, el dedo acusador señala al gobierno y los sindicatos preparan una huelga general, pero ¿nos hemos parado a pensar que parte de culpa tenemos nosotros como ciudadanos y como consumidores?.
Nuestros hábitos de consumo nos empujan a comprar lo más barato, no paramos a analizar donde y en qué condiciones ha sido fabricado. Hace unos años en España había una floreciente industria de electrodomésticos y productos manufacturados que daban empleo a cientos de miles de personas. Con la llegada de los productos importados de extremo oriente, este sector entró en crisis, el consumidor español se lanzo en tromba a la compra de productos de inferior calidad, pero mucho más baratos. Nadie se planteaba que esos bajos costes se conseguían a base de la explotación de niños y adultos sin ningún tipo de protección social. Pero claro, eso no era nuestro problema, la cuestión era comprar más y más barato.
En unos años nuestras calles se han llenado de establecimientos donde se venden productos de ínfima calidad a precios de saldo, algunos hablan de “invasión”, pero lo cierto es que si llegan es porque venden, y venden mucho.
Nuestra industria, con una carga impositiva y social mucho más alta, no puede competir con estas gangas y se producen despidos en masa y cierres de factorías, los ingresos de la seguridad social descienden a la vez que aumentan vertiginosamente los subsidios de paro.
La competencia se debe ejercer en igualdad de condiciones, y la industria nacional no puede competir contra países donde las cargas sociales y fiscales casi no existen.
Los sindicatos, en lugar de patalear y acusar al gobierno, deberían mentalizar a los trabajadores que comprar productos fabricados en estos países, es pan para hoy y hambre para mañana, y el hambre ya está llegando.
O nos replanteamos hoy mismo nuestros hábitos de compra o en poco tiempo no quedará en el país ni una multinacional ni una empresa española que pueda hacer frente a esta competencia desleal. Cuando el estado no pueda cubrir los subsidios de paro y el tejido industrial haya desaparecido, será el llanto y crujir de diente, pero entonces será demasiado tarde.
JUANMAROMO