jueves, 7 de julio de 2011

LO MUCHO QUE TE QUIERO


Es curioso que a pesar de lo mucho que te deseo, nunca imagino tu hermoso cuerpo desnudo, ni esas piernas entre las que pierdo el sentido, ni esos pechos de los que mana la vida. Cuando pienso en ti, aparecen tus ojos, esos ojos bellísimos que trasportan al séptimo cielo, esa mirada que me acaricia, esa voz que me dice ¡Te quiero!.

Cuando pienso en ti, me imagino acariciándote el alma con la yema de mis dedos, escucho el trino de tus labios cantando al amor que te inunda. Te quiero con la pureza del agua del deshielo, con la fuerza de un torrente de lava, con la dulzura de un niño mamando en tu pecho. Te quiero tanto que pierdo el rumbo de mis palabras, que dejo al pairo mi nave en el mar infinito de tu alma, que cuando miro un espejo, aparece tu rostro diciéndome ¡Te amo!. Sé que me estoy volviendo loco, pero es la locura de lo elegidos, la locura que buscaban místicos y ascetas. Te quiero tanto, que si un día te perdiera, me volvería cuerdo.

Juanmaromo